Broadcast Yourself LIVE |
POCOS DENARIOS DE OFENSAS O MILLONES DE TALENTOS DE PERDON
Texto: “ …un rey que decidió hacer cuentas con sus siervos, le llevaron a un que debía muchos millones … de plata(Textualmente diez mil talentos)…El rey tuvo compasión de él, le perdonó la deuda y lo dejó libre…Cuando este siervo se fue, se encontró con un compañero que le debía cien monedas de plata…Pero el primer siervo no quiso perdonarle la deuda y mandó echarlo a la cárcel hasta que pagara lo que le debía…Por esta razón, el rey se enojó muchísimo y entregó al siervo a los torturadores hasta que pagara todo lo que le debía…” Mt 18:21-35 (versión PDT).
Explicación: Pedro se acerca a Jesús y le dice: —Señor, ¿cuántas veces debo perdonar a mi
hermano si no deja de hacerme mal?, mostrando con esto que ya había entendido la enseñanza del perdon, ya no pregunta si debía o no perdonar, sino mas bien, hasta donde debía perdonar, y sin esperar la respuesta de Jesús, él mismo se responde y dice ¿hasta siete?, a lo que Jesús rectifica y le dice que no era siete sino hasta setenta, y siete veces(es decir 490 veces y al día(Jesús enseño vivir solo un día a la vez Mt 6:33-34), en otras palabras si alguien me ofende cada 2,4 minutos, cada 2,4 minutos lo debo perdonar, ante semejante respuesta muy seguramente la frase que se les pasaba por la mente de los apóstoles era ¡imposible perdonar tanto!, a lo cuál Jesús refiere una historia:
23»Por eso el reino de Dios* se puede comparar con un rey que decidió hacer cuentas con sus siervos, le llevaron a uno que debía muchos millones … de plata (Textualmente diez mil talentos. Esa cantidad equivalía aproximadamente a sesenta millones de denarios. Como el salario promedio de un trabajador era un denario por día (Ver Mateo 20:2), un trabajador tendría que trabajar miles de años para pagar esa deuda, lo que indica que la deuda era exorbitante, imposible de pagar.) 7El rey tuvo compasión de él, le perdonó la deuda y lo dejó libre.
28»Cuando este siervo se fue, se encontró con un compañero que le debía cien monedas de
plata (Textualmente cien denarios. Esta cantidad equivalía aproximadamente al salario de tres meses de un trabajador.) Entonces el siervo a quien el rey había perdonado agarró al otro del cuello y le dijo: “¡Págame lo que me debes!” 29El compañero se postró delante de él y le rogó: “Por favor, ten un poco de paciencia conmigo, yo te voy a pagar todo lo que te debo”. 30Pero el primer siervo no quiso perdonarle la deuda y mandó echarlo a la cárcel hasta que pagara lo que le debía.
32Entonces el rey lo llamó y le dijo: “¡Eres un mal siervo! Te perdoné la deuda porque me rogaste que tuviera compasión, 33¿no debiste haber mostrado compasión con tu compañero, así como yo la tuve contigo?” 34Por esta razón, el rey se enojó muchísimo y entregó al siervo a los torturadores hasta que pagara todo lo que le debía.
Hasta aqui era historía pero con las palabras que dijo a continuación ya lo vuelve realidad:
35»Así los tratará mi Padre que está en el cielo si ustedes no perdonan de todo corazón a sus hermanos».
Ese rey es Dios, el siervo que debía tanto somos nosotros, y el que debía es cualquier otra persona que nos halla ofendido, ¡jamás las ofensas que otro me haga serán iguales a las que yo le he hecho a Dios, y si no perdono lo poco que me debían no me perdonarán lo mucho que debo, los torturadores serán mi "pan diario" (tal es una vida con un rencor en el corazón)
aplicación: Lo mas duro de una ofensa puede ser que no sea la ofensa en si (el acto), sino la actitud que yo desarrolle a partir de ella (la actitud), quizá el otro cometió el acto y se olvido de el, pero a partir de ahi yo lo segui repasando y puede ser que ya lleve años con ello, ¿quien sufre mas, no es acaso quien conservo la actitud y no quien hizo el acto?, quizá la que quedo con la actitud de amargada como una violada sufrirá mas que el violador que cometió el acto, y todo esto por no querer perdonar, y como si fuera poco tal sufrimiento (vida entregada a "torturadores"), en el día del juicio final si no se arrepienten le cobraran los pecados al violador y quizá aún mas a la violada, por cuanto no quizo perdonar "100 denarios" de un acto de violación, no le perdonaran a ella "10.000 talentos" de una actitud de odio hacia el violador (y quiza al resto de los hombres).
acción: Divide una hoja en dos, en un lado vas a colocar las ofensas que te halla hecho la persona que mas daño te ha hecho (no te esfuerces en recordar los que se te olvidaron, si se te olvidaron, fue porque no te ofendieron tanto, solo anota los que recuerdes); en el otro lado vas a colocar las ofensas que tu le has hecho a Dios ya sea en pensamiento, obra u omisión, y concluye ¿quien a ofendido mas a quién? y toma la decisión de perdonar lo poco de las ofensas hechas a ti para ganar el perdon de tus muchos pecados.
La próxima semana si Dios lo permite te traeré una reflexión mas para meditar
pastor Wilson Gutiérrez